Caminaba solo,no tenia remedio,era inevitable pensar que necesitara en esos momentos compañía.Llovía,como siempre que podía permitirse el lujo de pensar en esas cosas y luego no arrepentirse.Era demasiado difícil cumplir una promesa de esas magnitudes teniendo el objeto de deseo a pocos dedos de distancia y una mirada de rapidez.
A si mismo se dijo de no olvidar,de conseguir sobrevivir solo recordando en secreto,nadie podía saber lo que pudiera representar una mirada fija y un gesto con ella.
Había incumplido su propio castigo impuesto,la había vuelto a mirar con ojos de ternura y ella se había dado cuenta de que le echaba de menos.Sabía que estaba detrás de él,como siempre que andaba cerca.
Sabia que tenia que significar algo especial que ella fuera la única persona a la que podía encontrar pese a que no estuviera cerca,pero no le gustaba esa idea ya que podía significar demasiadas otras cosas.Dejando atrás todo un pensamiento,deshaciéndose de la represión y haciendo caso al corazón que le pedía a gritos beber de nuevo de aquel dulce alimento prohibido, se giró,le miró a los ojos y se quito la mirada de mentira que había inventado solo para ella,era una de las maneras que había ingeniado para no hacerle daño cada vez que se miraban.Sorprendida e instintivamente,ella giró la cara,no quería ver la mirada de mentira que esperaba,por lo que se sorprendió al volver a abrir los ojos su mirada a menos de una respiración de distancia.Tranquilamente y sin miedo, el se dispuso a volver a sentir lo mismo que antes,si el corazón le pedía algo y no tenia nada que perder, no iba a ser menos y no disfrutar al máximo.Se escondió detrás de ella,olvidaron la lluvia y los paraguas se desvanecieron por el suelo.Un abrazo por parte de él por la espalda de ella,unas manos deslizándose con cariño por la cintura y un hombro al descubierto que pedía a gritos ser acariciado como antes con la suave boca de él.Entre el jadeo de ambos por contenerse de hacer lo que no debían se escuchó una promesa,que decía algo así como...[...]
Después de esas dulces palabras,ella sorprendida se dio la vuelta para ver si realmente decía la verdad,y lo que fue respuesta a su duda fue lo que deseaba sentir desde el día en el que él aprendió a mentirle con un velo.La verdad.
Un beso que no mentía.
Detrás de todas las represiones,detrás de todas las mentiras,a través de las miradas y gracias a la lluvia inesperada,los dos volvieron a ser uno,como él deseaba desde el día en el que la conoció,y como tendría que haber sido desde el momento en el que su cabeza solo era ella.
Algo así como...:
" Sabes que por ti todo y para siempre"
